Lo divino, lo humano y lo infernal en la gala del Met 2018

Por Meli.

Desde que anunciaron el tema de la exhibición de este año en el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York (‘Cuerpos celestiales: moda y la imaginación católica’) sabíamos que la alfombra roja de gala iba a estar buenísima.

A pesar de que muchas optaron por la fórmula facilista de ponerse cualquier vestido con una corona o tocado para estar acorde con la temática, también vimos grandes aciertos y grandes riesgos con buenos resultados. Pero como es costumbre, encontrar el balance no es fácil y por eso siempre hay las que terminan disfrazadas.

Esta vez comenzamos con las que mejor lo hicieron, seguimos con las menciones especiales y terminamos con los desastres que solo hacen más divertida esta noche.

Las mejores (y más a tono con el tema)

Zendaya en Atelier Versace

Considerando que hubo tantas que eligieron un vestido cualquiera y se pusieron el tema en la cabeza con una corona, le hacemos ovación de pie a esta chica porque mostró el catolicismo de otra manera, una mucho más poderosa que poniéndose una estola de virgen: una referencia directa a las Cruzadas, una de las etapas más oscuras de la iglesia. Un gramo más de metal y hubiera parecido disfrazada, pero por fortuna no cruzó esa línea e hizo tanto una declaración de moda como una crítica a la misma iglesia católica.

Blake Lively en Atelier Versace

Una diosa encarnada. El trabajo que lleva un vestido como este se aprecia a leguas y es una verdadera dicha poder admirarlo. Además, es una muestra perfecta del equilibrio entre la elegancia atemporal que requiere una gala y el tema de la noche.

Sarah Jessica Parker en Dolce & Gabbana Alta Moda

Jen la amó “más que a la vida misma” (palabras textuales) y concuerdo con ella en que nos hacía falta verla brillar así. Es puro drama y teatro, al tiempo que es una demostración de lo que es capaz la versión italiana de la Alta Costura. De hecho, nos extrañó mucho no ver más D&G en la alfombra roja.

Lily Collins en Givenchy Couture

Otra que nos encantó por salirse de la fórmula vestido + corona. Desde el halo, pasando por el maquillaje dramático y el aire gótico del vestido con paneles y transparencias, este fue un acercamiento que casi ninguna otra asistente eligió. Nos encanta.

Rosie Huntington-Whiteley en Ralph Lauren Collection

Con tantas coronas y tocados tratando de llamar la atención, la modelo y actriz se gana un lugar en esta lista porque el atuendo es tanto apropiado para el tema como versátil fuera de él. Una gracia etérea y un tocado es absolutamente celestial, perfecta.

Janelle Monae en Marc Jacobs

Nadie es tan hábil para llevar blanco y negro como ella. En otra ocasión, sin el tocado y el sombrero, el vestido igual iba a ser ganador, pero con esos dos elementos lo eleva y lo hace perfecto para el tema: nos lleva desde el convento hasta la misa del domingo.

Rihanna en Maison Margiela Artisanal por John Galliano

Ustedes saben que yo no soy fanática de su estilo –en absoluto–, pero es innegable que le apostó todo a este look: todo el riesgo, toda la opulencia, todo el significado. Y para esta ocasión, como cada año, funciona para ella. Creo que la gala del Met es el único evento en donde (casi) me gusta verla.

Menciones especiales

Priyanka Chopra en Ralph Lauren Collection

Les voy a ser honesta: el único motivo por el que ella no está en la lista anterior es porque ya había mucha gente, pero se ve absolutamente espectacular. El vestido por sí solo es un éxito (aún sin la mantilla), y lo digo yo que detesto el terciopelo.

Diane Kruger en Prabal Gurung

La sacan de la gala del Met y aun así va a ser de las mejores, y está en esta lista porque el próximo año nos vamos a acordar de este vestido, pero sobre todo del tocado.

Ariana Grande en Vera Wang

Este es el propio caso de “le hizo falta el centavo para el peso”: la idea de estampar los frescos de la Capilla Sixtina en el vestido es fantástica y el resultado es hermoso, pero se quedó corta. Y no nos encanta el lazo.

Lena Waithe en Carolina Herrera

Otra que nos gustó por su declaración: no es solo el traje (que por cierto está perfectamente ajustado) ni el drama de la capa, sino el mensaje de diversidad que todavía hoy es inaceptable para una de las iglesias más antiguas del mundo. ¿Quién dijo que la moda no sirve para expresar puntos de vista y hacer críticas?

Jennifer Lopez en Balmain

Ella tuvo su propia interpretación de lo que es un “cuerpo celestial”: todo el sex-appeal del mundo adornado con una cruz. 100% JLo, y nos encanta.

Lana del Rey en Gucci

No está entre los desastres de la noche porque el vestido es exquisito en su elaboración y detalles y por la fuerza de los símbolos (las dagas clavadas en el Sagrado Corazón). Pero una pluma más en ese tocado y se iba directo al universo de los disfraces.

Peores 

Cara Delevingne en Christian Dior Couture

Vestido: bien. Tocado: bien. Vestido CON tocado: mal.

Mindy Kaling en Vassilis Zoulias

El ejemplo más desastroso de “me pongo cualquier vestido y si le añado una corona, sale: gala del Met”. Además de que está pobremente ajustado (¿quién diseña un vestido que acentúa el gordito de la axila? ¡¿QUIÉN?!) y sumamente arrugado, no le hace ningún favor a su figura y al final es un pocotón de nada.

Salma Hayek en Altuzarra 

Salma Hayek está en esta lista porque es Salma Hayek. Intentó mostrar el Jardín del Edén y terminó pareciendo mantel de frutera.

Selena Gómez en Coach

¿Se acuerdan de ese capítulo de ‘Friends’ donde Ross va a un salón de bronceado? Selena también contó mal los “Mississippi”. No tengo nada más que decir.

Cardi B en Moschino por Jeremy Scott

Ustedes saben que no me gusta Jeremy Scott y casualmente tampoco me gusta Cardi B, así que no había poder humano ni divino que impidiera que ella estuviera en esta lista. No se iba a salvar ni si se quedaba en su casa viendo la alfombra roja por televisión, menos cuando se puso un disfraz de mantis religiosa en un viaje psicoactivo. Y que quede claro, su embarazo no tiene nada que ver: si no estuviera esperando un bebé se hubiera visto igual de mal.

Katy Perry en Atelier Versace

Si de algo sirvió la gala del Met fue para enterarnos de que Katy Perry es fanática del anime porque eso que se puso no es otra cosa que un disfraz salido directamente de ‘Los Caballeros del Zodiaco.

Tenemos que admitir que fue una de las mejores alfombras rojas que hemos visto en un buen rato, y es una lástima que no podamos incluir a más asistentes en la lista (después no acabamos nunca). ¿A ustedes qué les pareció? ¿Nos hizo falta alguien? Cuéntennos en los comentarios o a través de nuestras redes sociales (Instagram, Facebook y Twitter), y de paso gracias a todos los que replicaron nuestro cubrimiento el lunes. ¡Nos leemos pronto!